La gaceta de la cabeza

Anular el voto, o no anular el voto, esa es la cuestión

No se cómo voy a votar este 5 de Julio. Estoy harto de la política mexicana, todos los días escuchas noticias de algún político que se robó una lana, que no declaró tales bienes, que está asociado con tales gentes… O a veces hasta prefiero no prestar atención. Lo malo es que vienen las votaciones, y pues ya no se puede NO prestar atención.

Para estas votaciones me encanta la idea que está en boca de todos de ANULAR mi voto. Y decirles a los políticos: ¡NINGUNO MERECE MI VOTO! perros.

Varios amigos, familiares, conocidos están en las mismas. Y creo que el ejercicio que proponen en el grupo de Anúlalos (que me llegó por facebook) es el más apropiado, aunque parezca medio zonzo. El ejercicio va así:

  1. Analizar a los candidatos de nuestra localidad. Si te convence alguno, se acabó el ejercicio =P.
  2. Si no. Considera las opciones restantes: No votar o anular el voto.

Está fácil no. Lo malo es que el primer paso nadie lo hacemos. Y desde ahí estamos muy mal. ¿Cómo queremos que los políticos cambien cuando a nosotros nos vale queso en realidad la política? Yo hasta hace unos días no tenía ni idea de los nombres de los candidatos a la presidencia municipal de Zapopan. Ni digamos los candidatos a diputados de mi distrito.

Entonces, antes de decidir si vas a anular tu voto, creo que deberíamos empezar por ahí. Hace poco marcaron a la oficina de las oficinas de Hector Vielma (candidato del PRI) para ver si quería que visitara mi colonia. Les dije que sí. También pasaron a avisarnos que Guillermo Martínez (candidato del PAN) iba a estar en un parquecito por aquí cerquita para contestar las dudas que tuviéramos, y al final ni siquiera pude ir por la chamba… No está tan fácil conocerlos =P. Pero es el primer paso.